La comunidad de Cusárare y sus bellos paisajes

Cusárare representa una digna comunidad tarahumara  rodeada de bellos paisajes naturales

Cusárare goza de un amplio terreno donde se dispersa toda la población. En cualquier parte es común encontrar a los tarahumaras  vistiendo su típica vestimenta de colores intensos y realizando su tareas cotidianas. Todo en su comunidad esta conectado con la naturaleza, su aroma a pinos de bosque puede percibirse en cada rincón, sin duda la Sierra Tarahumara acoge a la comunidad entre bellos y magnificos paisajes.

Su fundador fue el padre jesuita Juan Fonte quién en 1607 diera el nombre de tarahumaras a los indios tepehuanes. Desde entonces se han conocido como los tarahumaras. también fueron los frailes jesuitas encargados en construir en 1702 el templo con adobe y piedra situado en el centro de la comunidad y al que dieron en nombre de los Santos Cinco Señores de Cusárare.

Una visita al Cusárare es darnos la oportunidad de contactar con la naturaleza y recordar la grandeza del país en que vivimos.

Una de las  mayores atracciones de la comunidad es la Cascada de Cusárare, la cuál esta considerada una de las más bellas de la Sierra Tarahumara con una impresionante caída de 30 metros. Su vista es impresionante desde el mirador y el camino descendiendo los 280 escalones te pondrán en contacto con todos tus sentidos al descender y sentir la fresca brisa en tu rostro y todo tu cuerpo, una experiencia que pocas veces podemos tener. Acampar al aire libre y practicar el rapel en sus inmensas rocas son actividades que se disfrutan con la familia.

Sus festividades más importantes son parte de su religión.

Para la comunidad Cusárare las celebraciones más relevante son la celebración de Semana Santa y la de la Virgen de Guadalupe siendo estos los más representativos de la región. El museo de Loyola acoje la colección de lienzos más importante del norte del país con pinturas de arte sacro situado en el centro de la comunidad.

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